Nació el 14 de agosto de 1860 en St. Gallen, Suiza. Es reconocida dentro de la comunidad Franciscana por haber fundado en 1894 la Congregación de Franciscanas de María Inmaculada.
En 1888, Monseñor Pedro Schumacher, misionero de San Vicente de Paúl y Obispo de Portoviejo, Ecuador, habría escrito a las religiosas de María Hilf, en Suiza, solicitando voluntarias para trabajar como misioneras en su diócesis.
Las religiosas respondieron con entusiasmo a esta invitación. Una de las más entusiastas para unirse a las misiones era la Madre Caridad Brader. La beata María Bernarda Bütler, superiora del convento que encabezaría el grupo de las seis misioneras, la eligió entre las voluntarias diciendo: “A la fundación misionera va la madre Caridad, generosa en sumo grado, que no retrocede ante ningún sacrificio y, con su extraordinario don de gentes y su pedagogía podrá prestar a la misión grandes servicios”.